La Ciudad enfrenta un problema profundo que ya atraviesa todas las edades y clases sociales: las adicciones y la salud mental. Integrar impulsa una política que deje de mirar para otro lado.
Hablar, prevenir, contener y acompañar tiene que ser política de Estado. Ninguna familia debería transitar sola estos problemas. La salud mental no es un lujo: es una urgencia que impacta en la vida, el aprendizaje, el trabajo y el futuro de los jóvenes.
Objetivos del equipo técnico
• Crear un plan integral de prevención en escuelas, clubes y espacios comunitarios.
• Aumentar la disponibilidad de atención psicológica accesible y de calidad.
• Desarrollar campañas masivas para derribar mitos, estigmas y silencios.
• Formar a entrenadores, docentes y clubes en detección temprana y acompañamiento.
• Impulsar una red territorial de centros de apoyo y grupos de acompañamiento.